Por Juan Pablo Ojeda
Chivas anda en modo urgencia. Con el Apertura 2025 cada vez más cerca, la directiva rojiblanca no encuentra quién se ponga el traje de estratega. Ya tocaron puertas en Europa y Sudamérica, pero las respuestas no han sido las que esperaban. Primero fue un “no” de Domenec Torrent, luego unas charlas que no cuajaron con Gabriel Milito, y ahora, suenan los tambores por un viejo conocido: Matías Almeyda.
Sí, el mismo “Pelado” que los llevó a tocar la gloria en su última etapa con el club, y con quien más de un aficionado sueña volver a ver en el banquillo del Estadio Akron. De acuerdo con el periodista argentino César Luis Merlo, Chivas ya se acercó al entorno del técnico, quien recientemente dejó su cargo en el AEK de Atenas. Pero, aunque hubo diálogo, la respuesta no fue la que la afición y la directiva querían escuchar.
Almeyda no cerró la puerta, pero tampoco la abrió de par en par. Agradeció el interés, reafirmó el cariño que le tiene al club y a la ciudad, pero dijo que necesita tiempo. Después de su salida del futbol griego, está evaluando con calma su próximo paso profesional, y no tiene prisa por tomar una decisión.
Este compás de espera no le viene nada bien a Chivas. El equipo necesita certezas y un proyecto sólido, y cada día que pasa sin técnico se convierte en una desventaja rumbo al próximo torneo. Por eso, aunque Almeyda sigue siendo una opción, el Rebaño no puede quedarse cruzado de brazos.
Ante esta situación, los tapatíos ya voltean a ver otras alternativas. Uno de los nombres que más fuerza ha tomado en los últimos días es el del colombiano Juan Carlos Osorio, un técnico con experiencia mundialista y paso por clubes importantes. Pero aún no hay nada cerrado, y la baraja sigue abierta.
Y es que el banquillo de Chivas ha sido una silla eléctrica desde que Almeyda se fue. En apenas unos años, han pasado 11 entrenadores, y solo uno logró llevarlos a una Final. La inestabilidad ha sido el sello, y la urgencia de volver a ser protagonistas pesa cada vez más.
Por ahora, la novela sigue. Chivas busca, negocia, espera… y mientras tanto, la afición cruza los dedos por un regreso soñado o, al menos, por un técnico que los saque del vaivén y los lleve de nuevo a pelear por el título.
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