Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aseguró este martes que en la Ciudad de México se han realizado importantes obras de infraestructura hidráulica para mitigar las inundaciones que cada año afectan a distintas zonas de la capital, particularmente durante la temporada de lluvias.
Desde su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum reconoció que las lluvias de los últimos días han provocado encharcamientos e inundaciones en vialidades clave como Calzada Ignacio Zaragoza, pero subrayó que el problema es complejo y multifactorial.
“Sí se han hecho muchas obras, pero hay que entender que el problema de las inundaciones en la ciudad no tiene una sola causa. Tiene que ver con la cantidad de agua que cae, que en muy poco tiempo satura el sistema de drenaje, y también con temas estructurales como la explotación de los mantos acuíferos”, explicó.
Una de las obras más relevantes que mencionó es el Túnel Emisor Oriente (TEO), considerado una de las infraestructuras más importantes en materia de desalojo de aguas pluviales. Este túnel, según Sheinbaum, “tiene un diámetro muy importante” y ha sido clave para aliviar las afectaciones en la zona oriente de la capital, una de las más vulnerables a inundaciones.
La mandataria también recordó que antes del TEO existía el Drenaje Profundo, una obra monumental construida en el siglo pasado, pero que ya resultaba insuficiente ante el crecimiento poblacional y el aumento de las lluvias extremas.
“El TEO ayuda mucho a que el agua salga más rápido, pero cuando cae tanta agua en tan poco tiempo, como está ocurriendo ahora con el cambio climático, no hay drenaje que lo soporte completamente”, agregó.
Sheinbaum insistió en que su gobierno ha hecho inversiones importantes en obras de captación y desfogue, pero advirtió que los retos seguirán mientras persistan eventos de lluvia intensa y problemas estructurales como el hundimiento de la ciudad, derivado de la sobreexplotación del subsuelo.
A pocos días del inicio formal de la temporada de lluvias, el gobierno federal y capitalino ya activaron protocolos de monitoreo y atención inmediata ante reportes de acumulaciones de agua, pero el llamado sigue siendo a la prevención y al mantenimiento constante de la infraestructura urbana.
Este fenómeno, común pero cada vez más intenso, pone de nuevo sobre la mesa la necesidad de planeación metropolitana y de seguir fortaleciendo los sistemas de infraestructura resiliente frente al cambio climático.
Deja una respuesta