Por primera vez en su historia, la selección de Uzbekistán jugará una Copa del Mundo. El equipo centroasiático aseguró su boleto para el Mundial de 2026, que se celebrará en Estados Unidos, México y Canadá, luego de empatar 0-0 frente a Emiratos Árabes Unidos en Abu Dabi, resultado que le garantizó uno de los dos primeros puestos del Grupo A de la fase de clasificación asiática.
El conjunto dirigido por Timur Kapadze ha completado una campaña sólida en la eliminatoria. Tras nueve jornadas, Uzbekistán suma cinco victorias, tres empates y apenas una derrota, ubicándose en la segunda posición del grupo, solo por detrás de Irán, que ya había asegurado su clasificación con antelación. Con este resultado, los uzbekos se convierten en debutantes para la edición de 2026, en un hecho sin precedentes para su fútbol nacional.
El encuentro clave tuvo lugar en el Al Nahyan Stadium, donde Uzbekistán necesitaba apenas un punto para cumplir el objetivo. A pesar de la presión de los Emiratos Árabes, el guardameta Utkir Yusupov fue determinante con tres atajadas en la segunda mitad, sosteniendo el empate que desató la celebración histórica del equipo centroasiático.
Entre los nombres destacados del plantel están el defensor Abdukodir Khusanov, del Manchester City, y el delantero Eldor Shomurodov, jugador de la Roma. Ambos han sido pilares en el rendimiento del equipo y símbolo del crecimiento del fútbol uzbeko en el ámbito internacional.
Con esta clasificación, Uzbekistán deja atrás décadas de intentos fallidos y se une a la élite del fútbol mundial. El boleto a 2026 no solo representa un logro deportivo, sino también un hito nacional que puede impulsar el desarrollo del balompié en la región y consolidar una nueva etapa para el país en el escenario global.
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